Tus hechos hablan mas alto que tus palabras

Admiro a las personas que muestran la capacidad para influir en otras personas. En especial cuando se trata de adolescentes.

El año pasado me maravilló un chico que conseguía influir en la gente joven que le tocaba gestionar y le pregunté como lo hacía.

Me respondió con una frase que me encantó. Me dijo:

«Chema, hace mucho que no escucho lo que me dicen, escucho lo que hacen»

Vivimos  instalados en la comodidad de las palabras y reacios a convertirlas en hechos, usando todas las trampas posibles del lenguaje para evitar comprometernos personalmente con los cambios que sabemos que necesitamos encarar.

Ejemplos de ese lenguaje son expresiones como:

«Hay que hacer…» «Tenemos que cambiar…» «Hay que proponer…»

Estos preciosos «brindis al sol» se quedan en eso, sin mas porque no utilizamos por un lado mensajes en primera persona, mensajes del «Yo» y por otro lado porque son palabras y no se materializan en hechos.

Para afrontar los cambios necesarios, para mejorar nuestras competencias, para desarrollarnos profesional y personalmente, necesitamos mas que palabras, necesitamos HECHOS.

Este análisis es igualmente válido en lo que a expresar emociones se refiere, nos falta en muchas ocasiones ser más explícitos con nuestras emociones y tener el atrevimiento adecuado para manifestarlas (de forma adecuada) en lugar de esperar a que el resto de personas las «adivinen».

Seguimos siendo pudorosos a la hora de expresar emociones de forma abierta y de trasladarlas a acciones y tengo una noticia importante…tenemos solo UNA VIDA para hacerlo.

¿Por qué retrasarlo? ¿Por que esperar?

Como decía en esta preciosa canción Extreme, necesitamos «More than words»

¿Verdad?